Playlist para la lectura de la reseña:
Mundo Infierno es una novela corta escrita por Philip José Farmer y publicado por Ediciones Gigamesh. Farmer es uno de los mayores representantes de la literatura de género, especialmente en ciencia ficción y fantasía, mundialmente conocido por la saga "El mundo del río". Ganador de varios premios Hugo, Nebula, Gran Maestro Damon Knight Memorial y el World Fantasy Award. Sus novelas tienen, mayoritariamente, tres grandes rasgos en común. El uso de personajes preexistentes; por ejemplo, en la novela de "Mundo del Río" se puede identificar claramente Mark Twain en el personaje de Samuel Clemens. A menudo aborda temas relacionados con el sexo; su recopilación de historias breves “Strange Relations”, de 1960, marcó un hito en la historia del sexo en la literatura de ciencia ficción. Por último, la religión aparece con gran fuerza en muchas de sus novelas y relatos; Jesús aparece como personaje en uno de los relatos de “Riverworld and Other Stories” y en la novela “Jesus on Mars”.
La edición de Gigamesh, como siempre, es de muy buena calidad. Una de las cosas que más me gustan de las ediciones de Gigamesh es la calidad del papel; un papel que, no sé cómo lo hacen, pero no se vuelve amarillo y eso es una cosa que me encanta. Cabe destacar el gran diseño de la portada, minimalista y que invita a la lectura desde el primer momento. La ilustración fue realizada por Alejandro Teran (Web).
Gigamesh | Colección: Gigamesh Breve| Idioma: Español | Páginas: 125 | Ciencia Ficción
“Mundo infierno” es un lugar sumamente oscuro lleno de ironía y en el que todo, absolutamente todo vale, y tremendamente surrealista. Donde las peores pesadillas pueden cobrar forma. El planeta es una enorme esfera, llena de desiertos sin fin, totalmente arrasado, desolado y en el centro del cual se encuentra un gigantesco sol. Los habitantes de este planeta son seres humanos y demonios fallecidos, aunque estos últimos se encuentran en un eslabón social por debajo. Además existe una organización, apodada ‘el intercambio’, que se encarga de difundir rumores para crear religiones y que, de esta manera, los condenados sientan que tienen un propósito y una esperanza en su eterna condena.
Todo empieza con Jack Cull (posiblemente un juego de palabras de la palabra “Chacal”). Éste se levanta un día normal, se prepara el desayuno, se afeita y se dirige al trabajo que tiene en el infierno. Jack se encuentra "atrapado" en este infierno, donde las necesidades básicas están cubiertas. Los habitantes tiene derecho a comida, ésta llueve periódicamente del cielo en forma de mejunje esponjoso. Todos los habitantes humanos tienen derecho a un trabajo; eso sí, las hostilidades de los otros trabajadores así como las traiciones están a la orden del día solamente para lograr un ascenso y, de esta forma, conseguir un estatus social más elevado. Los demonios de este mundo han sido esclavizados por los humanos. Fueron los amos y señores del infierno hasta que los humanos empezaron a llegar en masa. Siendo más numerosos y creyéndose así superiores, éstos esclavizaron a los demonios, les negaron sus derechos y les relegaron a objetos de burla. Sólo con la construcción del mundo, Farmer ya deja claro el alto contenido irónico y de humor negro de la novela.
Lo políticamente correcto no tiene cabida, Farmer no deja títere con cabeza. Uno de los grandes logros de la novelas es este punto, ya que logra sacarnos una sonrisa de situaciones brutales que suceden en este infierno totalmente surrealista. Por otro lado también pone en duda y totalmente en jaque diferentes conductas de la sociedad que parece que no llegan a cambiar nunca, como los comportamientos machistas y racistas. En este caso, lo hace a través de una protagonista femenina, Phyllis, y de algunos personajes de color.
Por otra parte hay dos personajes que junta a Jack sobresalen dentro de este mundo de despropósitos. El primero, el misterioso Señor X, el Mesías oscuro o ‘cristo bastardo’. Un Jesucristo totalmente desconcertante que lleva una sotana blanca y gafas de sol, que sólo aparece cuando muere alguien y que representa la esperanza para muchos de los habitantes de este mundo. Jack Cull, como trabajador de ‘el intercambio’ hará todo lo posible por desenmascarar el engaño que, según la organización por la que trabaja, oculta.
Jack contará con la ayuda de otro personaje, el mismísimo Fiódor Dostoievski, como antagonista. Como ya he comentado al principio, a Farmer le gustaba mucho incluir a sus novelas personajes preexistentes y esta no es una excepción. Dostoievski, a diferencia de Jack, está totalmente convencido de que el Señor X es el verdadero Mesías que puede salvarlos a todos.
En definitiva, Phyllis, la fría y bella expareja de Cull, Dostoievski y el mismo Jack, se lanzan a una alocada persecución que los lleva hasta los más profundos secretos del Infierno donde vivirán aventuras totalmente alocadas y surrealistas donde el lector podrá hacer mil y una interpretaciones. Eso sí, con una visión totalmente pesimista y para nada agradable de la vida y la existencia de la raza humana.
En definitiva, una novela que pone a disposición del lector, desde una visión totalmente pesimista y para nada agradable, la vida y la existencia de la raza humana, las dos caras de la moneda. La esperanza del cambio dentro de este particular averno a partir de un extraño y surrealista Mesías o, por lo contrario, seguir con sus patéticas vidas edulcoradas de los sentimientos más ruines, envidias, deseos y ansias de poder.
¿De qué lado se decantará la balanza? ¿Tendrá Jack Cull y todo su séquito de ‘el intercambio’ la razón? ¿O por el contrario, el Mesías resultará ser real y Dostoievski alcanzará la redención? En definitiva, una lectura más que recomendable.
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